viernes, 6 de abril de 2012

REYES / FARAONES - DINASTÍA XX

La Dinastía XX da su comienzo con Sethnajt (1188-1185 a. C.), del cual no hay certeza en cuanto a su origen, aunque algunos egiptólogos creen que proviene de la extensa familia ramésida, descendiente de alguno de los numerosos hijos de Ramsés II.
Acabó con la anarquía del país y logró expulsar a los invasores extranjeros.
Aparte de la reconstrucción y la vuelta a la normalidad, poco es lo que se sabe de las líneas políticas del breve reinado de Sethnajt. Restos de su actividad constructora nos han llegado del Sinaí, Elefantina, Pi-Ramsés, Tebas y Pi-Atum (la bíblica Pithom), donde construyó un templo al dios Atum, protector de la ciudad.

Ramses III (1185-1154 a. C.). Sucesor de Sethnajt. Fue el último gran rey - faraón del Reino Nuevo. Durante su reinado se hicieron grandes reformas administrativas y sociales que acabaron con la decadencia en Egipto.

Ordenó construir importantes ampliaciones en los templos de Luxor y Karnak, así como su templo funerario y el complejo administrativo en Medinet Habu, que están entre los más grandes y mejor conservados de Egipto.
Recuperó los tributos de Nubia y Asiria con los Fortaleció al ejercito, antes debilitado y sin efectivos, pudendo así hacer frente a las revueltas de los pueblos del este y el Oeste del Delta.

A la muerte de Ramsés III, Egipto inició su decadencia (incluso su muerte parece ser causa de una intriga en palacio).
Las crisis políticas se sucedieron por diversas causas:
  • - por influencias e intromisiones extranjeras en la política egipcia
  • - por el creciente poder de los sacerdotes de Amón,
  • - por el déficit económico, y
  • - por la progresiva presenciaa de asiáticos en la corte
Los posteriores tiempos de Ramsés III, le sucedieron ocho soberanos del mismo nombre, y fue un período de crisis dinástica.

Ramsés IV (1153 a 1147 a. C.). Diseñó una gran campaña edificatoria, a escala de la Ramsés II, duplicando el tamaño de las cuadrillas de trabajadores en Deir el-Medina a un total de 120 hombres, envió varias grandes expediciones a las canteras de Uadi Hammamat y el Sinaí.
Pero no vivió lo suficiente para lograr sus metas.

Ramsés V (1147 y 1143 a. C). Ramsés V era nieto de Ramsés III, hijo de Ramsés IV y sobrino de Ramsés VI, que le sucederá. Su reinado se caracterizó aumento de poder de los sumos sacerdotes de Amón que controlaban gran parte de las tierras del país y las finanzas del Estado a expensas del faraón.

Durante su reinado fue escrito el papiro Wilbour, importante documento fiscal y de asuntos económicos generales, que manifiesta el creciente poder del sumo sacerdote de Amón, Ramsésnajt.
Tumba para Ramsés V, posteriormente usurpada por su tío Ramsés VI.

Ramsés VI (1143 a 1136 a. C.). Usurpó el trono de su sobrino, Ramsés V, también los cartuchos de reyes anteriores y mandó grabar su nombre en la lista de reyes en Medinet Habu para legitimar su reinado y realzar su autoridad.

Ramsés VII (1136 a 1129 a. C). Hijo y sucesor de Ramsés VI y su esposa Nubchesbed. Tuvo un hijo que murió antes de poder gobernar. El sucesor fue su tío Ramsés VIII.

De su reinado se recogen varios documentos administrativos y económicos y cinco himnos para el faraón. Los documentos descubiertos en la ciudad de los trabajadores de Deir el-Medina muestran la crisis económica de su época, que instan a una revuelta por los altos precios del grano. En el Papiro de Turín 1907-1908 está datado el año séptimo de su reinado.

Ramsés VIII (1129 a 1126 a. C.). Probablemente hijo de Ramsés III. Su reinado duró menos de un año, probablemente sólo tres meses y 19 días, siendo el faraón menos conocido de esta dinastía. Solamente es conocida una fecha de su reinado, el 2º día de I Peret del año 1º, grabada en la tumba de Kienebu en Tebas.

Ramsés IX (1126 a 1108 a. C.). Intentó devolver a Egipto cierta seguridad e influencia. Organizó viajes a Asia y Nubia para abrir de nuevo rutas comerciales, pero Egipto había perdido el control sobre las regiones de Asia, aunque todavía mantenía su presencia en Nubia.
Estela de Ramsés IX
Trató de revitalizar el estado patrocinando la ampliación de los templos de Karnak y Heliópolis, pero su reinado padeció de inestabilidad política y social. Las malas cosechas trajeron una época de hambruna, donde las incursiones de libios del desierto occidental y los mercenarios extranjeros avivaban los desórdenes.
El clero tebano de Amón manifestaba su considerable poder, y el sumo sacerdote de Amón, Amenhotep, se hizo representar en unos bajorrelieves de templo de Karnak del mismo tamaño que el faraón.

Ramsés X (1108 a 1099 a. C). Reinado poco documentado. Todo lo que se conoce realmente acerca de su reinado es que la inseguridad y la oleada de los robos de tumbas, que habían llegado a ser habituales bajo soberanos anteriores, continuó prosperando bajo su reinado.

Ramsés XI (1099 a 1069 a. C.). Último rey de la dinastía XX de Egipto. Con este faraón termina la época ramésida del Imperio Nuevo.
El conflicto civil era ya evidente al principio de su reinado cuando el Sumo sacerdote de Amón, Amenhotep, fue destituido del cargo por el rey con ayuda de los soldados de Nubia bajo las órdenes de Panehesy, el virrey de Nubia. Los robos de tumbas eran frecuentes por todas partes, las fortunas de Egipto disminuyeron y sus dominios asiáticos se perdieron.
Debido a la situación de caos Herihor utilizó al ejército egipcio para restaurar el orden, y llegó a ser el nuevo Sumo sacerdote de Amón. Ramsés XI en el decimonoveno año de reinado estableció un triunvirato, con Herihor que gobernaba Tebas y el Alto Egipto, y con Esmendes que controlaba el Bajo Egipto. Herihor acumuló poder y títulos a costa de Panehesy, el virrey de Nubia, a quien él había expulsado de Tebas. Esta rivalidad originó la guerra civil. En Tebas, Herihor usurpó el poder, sin deponer a Ramsés, simplemente ignorando la autoridad de rey.

Herihor (1080-1074 a. C.) fundó la Dinastía XXI de Reyes y Sacerdotes, ya del Tercer Período Intermedio.